Nutrición Ortomolecular
Entrevista a Miguel
Leopoldo Alvarado Saldaña
Entrevista realizada por
la periodista Chilena Jenny Navas
Santiago de Chile
¿Qué
es la nutrición ortomolecular?
Es un modelo de nutrición cuyo propósito principal es
mediante una dieta compuesta de alimentos naturales, de elevada calidad
nutritiva, y en ocasiones dependiendo del caso, acompañada de complementos
nutritivos, lograr una salud óptima, una larga vida libre de enfermedades,
llena de vitalidad y exitosa.
La Nutrición Ortomolecular es un paradigma (modelo) de
cuidado de la salud, edificado con principios y postulados científicamente
fundamentados, dirigido a lograr una nutrición óptima y como consecuencia, una
salud óptima.
Una de sus premisas primordiales es la certeza científica de
que las células del cuerpo humano se encuentran dotadas de los mecanismos
químicos y fisiológicos necesarios para mantenerse sanas y repararse a sí
mismas, cuando su estructura y su maquinaria bioquímica ha sido dañada por el
desgaste cotidiano y por otros diversos factores del medio ambiente.
Sin embargo, para lograr dicha la reparación, es necesario
el abastecimiento de nutrientes esenciales, nutrientes accesorios y de otras
biomoléculas en su forma estructural natural, biológicamente activa, siendo
esta la única forma en la que funcionan como refacciones de precisión, capaces
de acoplarse con perfección a la sofisticada y delicada maquinaria bioquímica
de las células.
Es fundamental que las sustancias utilizadas como materias
primas para el trabajo de mantenimiento y reparación celular se proporcionen en
su forma estructural biológicamente activa, en cantidades y proporciones
correctas, tal como se encuentran presentes en los alimentos naturales sin
modificaciones industriales, de manera continua, todas a un mismo tiempo;
siendo así afines y compatibles con el cuerpo humano, y logren acoplarse
adecuadamente a las cadenas metabólicas celulares. Todo lo anterior implica que
respecto a la nutrición debe cumplirse con un riguroso control de calidad,
impuesto por la naturaleza, durante los millones de años de evolución.
Dicho abastecimiento deberá ser capaz de satisfacer tanto
las necesidades normales, como las necesidades particulares y especiales de
cada persona en lo individual, las cuales pueden ser distintas de acuerdo al
principio de Individualidad Bioquímica, postulado por Roger J. Williams.
El contenido de nutrientes y de las demás biomoléculas de
importancia vital, presentes en los alimentos naturales son capaces de
satisfacer las necesidades de un amplio segmento de una población en general,
aproximadamente un 50 % de una población determinada, pero no de todas las
personas, ya que como ha demostrado por diversos investigadores,
aproximadamente un 25 % de personas de una población dada, necesitan dosis
ligeramente superiores a las raciones mínimas recomendadas, y un 25 % de esa
misma población, tendrá por diversas razones, genéticas, epigenéticas,
medioambientales y/o psicosociales, necesidades sumamente acrecentadas,
bastante superiores a las raciones mínimas recomendadas, imposibles de ser
satisfechas ni con la mejor alimentación, por lo que el 25 % restante,
necesitará para tener una salud óptima, consumir complementos nutritivos.
Además, en distintas regiones del mundo, debido a los diferentes
métodos de producción, transporte, almacenamiento e industrialización de los
alimentos, los productos
comestibles, pueden ser o pobres, o sumamente pobres, o incluso
completamente carentes de diversos nutrientes y micronutrientes esenciales,
accesorios y de otras biomoléculas útiles para la conservación de la salud
humana.
Todo lo anterior, hace necesario que además de una dieta
compuesta de alimentos naturales, sin procesar, con una aceptable calidad
nutritiva, una importante proporción de todas las personas, personas necesiten
y se vean ampliamente beneficiados por el consumo rutinario de diversos
complementos nutritivos.
Principio de
Individualidad Bioquímica
Proveer a cada célula del cuerpo humano, de un microambiente
molecularmente correcto para el mantenimiento de reparación de las células y
tejidos, es el propósito fundamental de la nutrición ortomolecular. Pero para
que el abastecimiento de nutrientes y de otras biomoléculas protectoras, sea
individualmente correcto y adecuado, es primordial que se haga de acuerdo al
Principio de Individualidad Bioquímica, postulado por Roger J. Williams. Según
este principio cada persona tiene una especie de huella dactilar bioquímica que
lo hace único, una individualidad bioquímica original y distinta a las demás,
que le hace tener una necesidad única e individual de nutrientes, distinta a la
necesidad de todas las demás personas, que de no satisfacerse, tarde o temprano
conducirá a alguna enfermedad crónicodegenerativas definida como enfermedad
genetotrófica.
Según ese principio de individualidad bioquímica, algunas
personas pueden arreglárselas muy bien para mantenerse sanos, con las raciones
diarias recomendadas (RDA) de nutrientes, que son las dosis mínimas para evitar
una enfermedad carencial, pero otras personas ya sea por causas genéticas,
epigenéticas, medioambientales o psicosociales, pueden tener necesidades
acrecentadas, sumamente superiores a las recomendaciones mínimas, las que al no
ser satisfechas, predispondrán o precipitaran diversas enfermedades
crónicodegenerativas.
El paradigma ortomolecular considera que el cuerpo humano
está hecho para vivir con pleno vigor y libre de enfermedades, hasta una edad
aproximada a los 110 años. Sin embargo, la mayoría de la gente padece y sufre
toda su vida una diversidad de molestias y de enfermedades que degradan su
calidad de vida obstaculizan su desarrollo humano, y conducen a la mayoría de
las personas a sufrir una muerte prematura. Actualmente, solo una de cada 10
mil personas llega a vivir cerca de los 100 años de edad, y solo una entre
varios millones de personas llega a ser supercentenaria y alcanza los 110 años
de edad. Y lo más grave es que la tasa de muertes prematuras a edades muy
tempranas, incluso en deportistas de alto rendimiento, sigue en ascenso.
Con el modelo de nutrición convencional, la mayoría de las
personas solo pueden lograr una nutrición promedio con un estado de salud
promedio y sufrirán por lo tanto, un promedio de enfermedades. Pero el modelo
de la nutrición ortomolecular, sostiene que el cuerpo humano está hecho para
gozar de una salud óptima, la cual es superior a la salud promedio y que eso se
logra solamente con una nutrición individualmente óptima.
Las cifras y los pronósticos estadísticos oficiales,
muestran una continua y progresiva degradación de la salud física y mental, que
empezó hace unos 150 años, cuando se inició la revolución industrial aplicada a
la producción de los alimentos.
En la medida en que se fueron sustituyendo los alimentos y
los platillos naturales y tradicionales, por alimentos elaborados con
ingredientes refinados y aditivos químicos, en esa misma proporción con una
relación directa y proporcional fueron apareciendo las enfermedades típicas de
la civilización industrial, produciendo una progresiva decadencia física y
mental del hombre.
Cada nueva generación de personas alimentadas con la típica
dieta industrial occidentalizada, compuesta de productos alimenticios
artificiales, elaborados con ingredientes refinados y aditivos químicos, ha ido
aumentando la incidencia de enfermedades crónicodegenerativas y la
predisposición a una muerte prematura, la cual se produce a una edad cada vez
más temprana.
Siendo así que actualmente, jóvenes, adolescentes y niños
padecen enfermedades que hasta hace unos 150 años, solo sufrían las personas de
edad avanzada, luego a mediados del siglo XX, personas de mediana edad (50
años) y que ahora en este momento, afectan a personas de todas las edades,
incluyendo jóvenes adolescentes y niños, produciendo la mayor transformación
epidemiológica de toda la historia humana.
La epidemia de sobrepeso, obesidad y enfermedades
crónicodegenerativas, especialmente diabetes, enfermedad cardiovascular,
artritis, insuficiencia renal crónica, insuficiencia hepática (hígado graso no alcohólico),
ciertos tipos de cáncer, así como un sinnúmero de enfermedades más, se ha
extendido a todas las poblaciones del mundo, así como a todos los segmentos
poblacionales.
Según un estudio prospectivo del Centro para el Control y la
Prevención de Enfermedades (CDC, por sus siglas en ingles), las próximas
generaciones sufrirán de una mayor incidencia de obesidad y enfermedades
degenerativas relacionadas a un mal estado de nutrición, reduciendo su
expectativa promedio de vida, los padres empezaran a enterrar a sus hijos,
quienes morirán cada vez más jóvenes.
¿Cómo la definiría?
Como afirmé anteriormente, respondiendo en la respuesta a la
pregunta anterior, el paradigma ortomolecular es un modelo de cuidado de la
salud que busca lograr una nutrición óptima y por ende una salud óptima.
El vocablo
ortomolecular, y los postulados en que se fundamenta el método, fueron acuñados
por Linus Pauling en su primer artículo sobre psiquiatría ortomolecular
titulado “Orthomolecular psychiatry”, publicado en la prestigiada revista
Science, antes de que publicara su primer ensayo sobre la vitamina C titulado
"Vitamina C y Catarro Común", publicado en 1970.
El concepto
ortomolecular fue creado por Pauling para definir lo que el mismo llamo “una
nueva y revolucionaria ciencia y arte de curar” (Pauling, Linus), cuya
estrategia terapéutica consiste principalmente, en suministrar un terreno
molecular óptimo a las células, tejidos y órganos del cuerpo humano. Lo que
involucraría en primer lugar una alimentación saludable compuesta
exclusivamente de alimentos naturales, integrales y cultivados o producidos con
procedimientos biológicos (orgánicos), excluyendo todo tipo de “productos
comestibles artificiales”, así como también una nutrición individualmente
óptima, para lo cual muchas veces es necesaria la prescripción de nutrientes
extras por medio de complementos nutritivos.
Etimológicamente
hablando, el prefijo orto procedente del gr. orthós,
significa: derecho, regular, correcto, recto y molecular es el adjetivo
relativo a las moléculas, en este caso refiriendo a las biomoléculas (entre
otras a los nutrientes) que de manera natural y habitualmente se encuentran
presentes en los organismos vivos que nos sirven de alimento, que son afines a
la estructura y fisiología de las células del cuerpo humano.
Ortomolecular es
en consecuencia, un término que significa una idea fundamental: proporcionar al
organismo humano la materia prima molecular correcta: como ya lo mencioné con
anterioridad, las biomoléculas con una estructura y forma correctas, en
cantidades y proporciones correctas, para lograr en los billones de células que
componen los tejidos, órganos y aparatos, del cuerpo humano, un estado y
funcionamiento fisiológico óptimo
Reiterando y recapitulando, el método ortomolecular consiste
en proporcionar al cuerpo humano para el mantenimiento y la reparación celular,
de manera individual, tomando en cuenta el principio de individualidad
bioquímica, de cada persona, las biomoléculas necesarias, en las formas
correctas, en las cantidades correctas y en las proporciones correctas.
En otras palabras, se trata de abastecer a cada una de los
billones de células de cada persona de la materia prima que se necesita para
lograr una buena reparación molecular. El cuerpo humano cuenta con los
mecanismos adecuados de autoreparación y de autosanación natural, lo único que
necesita es que se le dote de las biomoléculas naturales para lograrlo.
La filosofía del paradigma ortomolecular sostiene que es
mejor trabajar en el mantenimiento y restauración de la salud, en equipo y de
acuerdo con la naturaleza, que ir en contra de ella, prescribiendo moléculas
extrañas a la naturaleza y al cuerpo humano como son el caso de las sustancias
químicas sintéticas que utiliza la industria agrícola y ganadera, los aditivos
químicos que utiliza la industria alimentaria, y los químicos sintéticos que
utiliza la industria farmacéutica.
Las sustancias naturales incluyendo macronutrientes, y
micronutrientes (vitaminas, minerales y oligoelementos), nutrientes accesorios
como enzimas y coenzimas, fibras dietarias, prebióticos y probióticos y otras
biomoléculas presentes en los alimentos naturales, son afines a la naturaleza
del cuerpo humano, se amoldan y se incorporan perfectamente a la maquinaria
bioquímica natural de las células, por lo que facilitan las transformaciones
bioquímicas y las rutas metabólicas. Mientras que las sustancias artificiales
de origen industrial, son ajenas a la naturaleza, incapaces de incorporarse a
la maquinaria bioquímica de las células, lo cual entorpece y bloquea las rutas
metabólicas, siendo muchas de dichas sustancias tóxicas y nocivas para la
salud.
¿Cuáles
son sus pilares básicos?
Los
postulados científicos que fundamentan el paradigma ortomolecular son varios y
diversos, pero los principales por su importancia son los siguientes.
1.- Principio de
las biomoléculas. Por el cual es preciso utilizar para nutrir, mantener
la salud y sanar, las sustancias que existen naturalmente en los alimentos y en
el interior del cuerpo humano. Hablando de alimentos y de medicamentos, la
naturaleza hace mejor las cosas que la industria humana. Es mejor trabajar en
consenso con la naturaleza que en contra de ella.
2.- Principio de
autoreparación y de sanación. El cuerpo humano tiene la capacidad de la
autoreparación y la autosanación, solo necesita que se le abastezca de los
materiales naturales adecuados.
3.- Principio de
la dieta compuesta de alimentos naturales. La base principal de
cualquier tratamiento es una dieta individualizada compuesta de alimentos
naturales, lo menos procesados y/o cocinados posible.
4.- Principio de
la dieta individualizada. No existe la dieta ideal para todos, no
existe una dieta estándar para todas las personas. No existe una dieta correcta
aplicable por igual a todas las personas.
5.- Principio de
individualidad bioquímica (de Roger Williams). Para la prescripción e
dietas y tratamientos es preciso tener en consideración el principio de
individualidad bioquímica.
6.- Principio de
la sinergia de nutrientes. Existen más de 50 nutrientes esenciales
(indispensables) y otros tantos accesorios, no esenciales (dispensables), pero
la mayoría de ellos deben estar presentes en las formas, las cantidades y las
proporciones correcta a un mismo tiempo, para lograr una eficiencia metabólica
óptima.
¿En
qué se diferencia la nutrición ortomolecular en relación a otras variantes como
la nutrición relacionada con los grupos sanguíneos/dieta del genotipo?
El Dr. Peter J. D’Adamo creador primero de la dieta de los
grupos sanguíneos, y posteriormente de la dieta del genotipo, agrupa a las
personas según su tipo de sangre, o según su genotipo y establece una dieta
estandarizada para cada grupo, sin tomar en cuenta ni la individualidad
bioquímica, ni los distintos grados de adaptación epigenética que han tenido
diversas poblaciones del mundo.
La nutrición ortomolecular se fundamentada en el principio
de individualidad bioquímica y sostiene que no se pueden estandarizar las
dietas o los tratamientos nutricionales ni para una población en general, ni
para grupos de personas con un tipo de sangre o de genotipo especifico, porque
cada persona es bioquímicamente distinta a todas las demás y por lo tanto sus
necesidades nutricionales son diferentes. Roger J. Williams demostró que
incluso dos gemelos genéticamente idénticos, pueden tener una individualidad
biológica distinta, moldeada por diversos factores y variables genéticas y
ambientales, y por lo tanto, pueden tener necesidades de nutrientes muy
diferentes entre los dos. El paradigma ortomolecular sostiene que algunas
personas, independientemente de su tipo de sangre, pueden tener necesidades
sumamente elevadas de algunos nutrientes para poder gozar de una salud optima;
y de no satisfacer cada persona esa necesidad individualmente acrecentada,
irremediablemente se deteriorara la salud y se enfermará.
¿Cómo
puede la nutrición ortomolecular ayudar a combatir la epidemia del
sobrepeso/obesidad y otras enfermedades crónico-degenerativas?
El hombre moderno tiene el código genético y la maquinaria
biológica, química y hormonal del hombre de la era paleolítica, pero se
encuentra viviendo inmerso en un mundo extraño y ajeno a sus genes. En la
biosfera se vierten todos los días millones de toneladas de sustancias químicas
extrañas a la naturaleza que hasta hace poco tiempo no existían. Muchas
sustancias presentes en la polución del medio ambiente destruyen nutrientes o
acrecientan sus necesidades y producen efectos de disruptores hormonales, son
obesogénicas y diabetogénicas. Vivimos en un mundo molecularmente incorrecto y
contrario a nuestros genes.
Nuestros alimentos, han sido molecularmente alterados,
conteniendo ingredientes artificiales y macronutrientes en forma, cantidades y
proporciones que no existen en la naturaleza, y a su vez han sido despojados de
la mayoría de sus micronutrientes (vitaminas, minerales y oligoelementos),
nutrientes accesorios, fotoquímicos, fibras, enzimas y coenzimas; se ha
incorporado a los alimentos industrializados, una gran cantidad y variedad de
sustancias químicas artificiales, residuos de la industria agroquímica, y un
sinnúmero de aditivos químicos. Haciendo con todo ellos a nuestros alimentos
molecularmente incorrectos, incapaces de sostener la salud. Se dice que le
epidemia de enfermedades modernas son un síndrome de inadaptación a la dieta de
origen industrial, y por ello serian un subproducto de la civilización
industrial.
Por lo tanto, la solución a la epidemia de enfermedades
crónicodegenerativas es muy simple, por una parte, retornar a la naturaleza y comer
como lo hacían nuestros ancestros, y por otra parte procurar satisfacer el
requerimiento de algunos nutrientes específicos, cuya necesidad individual sea
superior a las raciones mínimas recomendadas.
Por otra parte, es muy importante y de vital importancia el
cuidado del medio ambiente en general, así como del entorno inmediato de cada
persona en lo individual, en su hogar, en su trabajo y en todas las partes en
donde uno se desenvuelve cotidianamente.
Cuidar la naturaleza, retornar a la naturaleza en todos los
aspectos de la vida es así, el antídoto más efectivo que existe contra la
epidemia de sobrepeso, obesidad y las demás enfermedades de la civilización.
¿Puede
hablarnos de algún caso clínico relevante que se haya mejorado
significativamente gracias a la terapia de la nutrición ortomolecular?
Cuento con innumerables ejemplos clínicamente fundamentados
y documentados en sus respectivos expedientes. Pero uno entre muchísimos
ejemplos, es el de un paciente varón de 50 años de edad, que acudió a consulta
hace dos años porque deseaba bajar de peso y encontrar la forma de reducir la
administración de insulina pues estaba gastando mucho dinero en adquirirla.
En su interrogatorio, el paciente se describió a si mismo de
la siguiente manera: “Tengo problemas de andropausia, me siento decepcionado,
deprimido, culpable, con sentimientos encontrados… Con fuertes sentimientos de
arrepentimiento, de si hubiera hecho o no tal o cual cosa… Con una severa
crisis existencial… Tengo que tomar Viagra, pues tengo disfunción eréctil… Me
siento cansado todo el día, decaído, estoy y me siento obeso, por lo que quiero
bajar de peso… Me siento todo el día cansado, irritable, soñoliento y algunas
veces deprimido… Tengo hambre todo el tiempo, especialmente antojo de pan y
otros carbohidratos… El propósito de mi consulta es bajar de peso y reducir la
insulina que me estoy aplicando porque gasto mucho dinero en adquirirla”.
Me informó que recientemente había padecido cáncer, por lo
que había sido sometido a quimioterapia y radioterapia, lo cual había
debilitado su sistema inmunológico. También mencionó que hace varios años se le
había diagnosticado diabetes mellitus tipo II. Para lo cual sus médicos le
prescribieron un fármaco hipoglucemiante denominado Metformina y dos inyecciones
diarias de insulina, una en la mañana y otra en la noche. Tenía
hipercolesterolemia, hipertrigliceridemia e hipertensión, por lo que se le
había prescrito un fármaco reductor del colesterol y otro para controlar la
presión arterial. Además tenía mucho sobrepeso por lo cual sus médicos le
dijeron que debería bajar de peso, pero nunca le explicaron cómo, y por ello
ahora quería someterse a una dieta reductiva.
Sus médicos le dijeron que no había curación para su
diabetes ni su hipertensión. Que debería de controlarse de por vida con los
medicamentos que le prescribieron. También le dijeron que debería que bajar de
peso, pero no le dijeron como hacerlo, solo que debería comer menos y controlar
las porciones de sus alimentos.
En mi consultorio se le realizo un respectivo estudio
antropométrico, de composición corporal y de marcadores biológicos, se le
prescribió una dieta baja en grasas y en carbohidratos (con menos de 30 gramos
al día), libre al 100 % de alimentos elaborados con ingredientes refinados. Se
le indicó por lo tanto que suprimiera el pan, galletas, cereales, arroz,
pastas, tortillas, papa, zanahoria, yuca, y otros tubérculos altos en hidratos
de carbono, frutas, jugos de fruta, todo tipo de miel, todo lo que tuviera
azúcar, harinas y aceites refinados, así como todo tipo de alimentos
industrializados.
Su dieta consistió en un desayuno de huevos frescos y
orgánicos a acompañados con verduras preparados con aceite de oliva virgen. Te
o café sin azúcar.
A mediodía, una
colación de jícama o pepino, o alguna otra verdura, queso fresco y aguacate o
pepino.
Al medio día, como comida principal, una ensalada de
vegetales crudos sin aderezos industrializados, con aderezos hechos en casa, un
plato fuerte de alguna proteína animal como carne, pollo, pescados o mariscos,
todo con la menor cantidad de grasa posible. Agua, te o café sin azúcar.
En la noche podría comer una ensalada con una combinación de
verduras crudas y cocidas, con alguna proteína ligera como queso fresco, pollo
o algún marisco. O bien, podría sustituir su cena por un batido de proteína
aislada y concentrada de suero de leche endulzada con Stevia, con yogur natural
sin grasa o con agua.
Como grasa para preparar o acompañar sus alimentos solo se
le permitió aceite de oliva extravirgen.
El tratamiento de complementos
nutritivos fue el siguiente
|
PRODUCTO
|
DOSIFICACIÓN
|
Ultimate Man
50+ (marca Vitamin Shoppe) *
(Multivitaminas)
|
3 al día, 1
antes de cada alimento
|
Vitamina E
natural ( de alfa tocoferol) de 400 U. I.
|
6 al día, 2
antes de cada alimento
|
Cromium
(picolinato de cromo) de 200 mcg
|
3 al día, 1
antes de cada alimento
|
Triple
Strength Fish Oil (marca GNC ) (Aceite de pescado de aguas fritas destilado
libre de PBC y mercurio, con una triple cantidad de EPA y DHA)
|
3 al día, 1 antes
de cada alimento
|
CoQ-10 200 mg
(Coenzima Q-10)
|
1 al día
|
Vitamina C
natural de 1000 mg acompañada de flavonoides cítricos.
|
1 al día
|
Alpha Lipoic
Acid (Acido Alfa Lipoico) 200 mg
|
1 al día
|
Pycnogenol de
30 mg
|
3 al día, una
antes de cada alimento
|
Carnosine de
500 mg
|
1 al día
|
Vitamina D de
1000 mcg
|
1 al día
|
Calcio,
magnesio, zinc + vitamina D
|
3 al día, 1
antes de cada alimento
|
Pantothenic
Acid (Ácido Pantoténico) de 500 mg
|
1 al día
|
Super Enzymes
(marca Now)
|
3 al día, 1
después de cada alimento
|
* Un multivitamínico con todo el complejo B en dosis de 50
mg. De cada una de dichas vitaminas y una mezcla variada de minerales,
oligoelementos, enzimas, coenzimas, antioxidantes y algunas plantas
medicinales.
Al principio
se le indico que continuara tomando sus medicamentos alópatas, pero poco a poco
los fue disminuyendo, y luego suprimiendo.
Resultado:
Después de tres meses de tratamiento pudo reducir
drásticamente su aplicación de insulina, suprimir la Metformina, y los demás
fármacos alópatas que estaba consumiendo. Su glucosa en ayuno y postprandial,
su colesterol, sus triglicéridos y su presión arterial disminuyeron
drásticamente a rangos casi normales. Si nivel de energía, vitalidad,
entusiasmo por la vida se incrementaron notablemente. El decaimiento y la
depresión casi desaparecieron. Exceso de peso, su grasa corporal total y su
grasa intraabdominal disminuyeron también drásticamente. En 3 meses había
bajado 20 libras. Su perímetro abdominal disminuyo 12 centímetros. Actualmente
sigue a dieta y en tratamiento. Algunas veces se da el gusto de tomar alguna
copa de vino tinto. En general se siente muy bien y rinde mejor en su trabajo.
Como este, tengo varios casos parecidos y muchos otros
distintos que también se han abordado con un éxito impresionante.
¿Existen
expertos calificados en Chile?
Si, existen varios profesionales de la salud expertos y
calificados en el método ortomolecular. Entre varios otros se encuentran los
siguientes: la Lic. Sandra Farré Schneider; Lic. Nut. Catalina Crichton; Lic.
Nut. María Angélica Benvenuto; Bioquímica Andrea Chicurel; Lic. Nut. Vanessa
Mieres Pérez; Lic. Nut. María Fernanda Torres Taropulos; y muchos otros que
incluso se graduaron recientemente en un diplomado que impartimos nosotros por
medio del Instituto Tecnológico de Estudios Superiores de Monterrey.
¿A
nivel mundial cual es la tendencia? Cada vez hay más profesionales de la salud
que se están especializando en la nutrición ortomolecular?
En el transcurrir de los últimos 20 años, venciendo
obstáculos resistencia y oposición de diverso y poderosos intereses, el
paradigma ortomolecular se ha ido abriendo paso creciendo ininterrumpidamente
el número de profesionales de la salud convencidos de la eficacia del método
ortomolecular. El paradigma ortomolecular se ha ido convirtiendo en un
movimiento profesional y académico de grandes magnitudes que abarca
prácticamente a todos los países del mundo. Además ahora ya se considera como
la primera elección en el tratamiento de diversas enfermedades crónicodegenerativas.
La proyección que se puede hacer en este momento es que el método ortomolecular
se continúe abriendo paso, sigan creciendo sus adeptos y se aplique cada vez
más a la medicina, a la psiquiatría y a la nutrición. El método ortomolecular
es y será aún más la verdadera medicina del futuro.
En este momento en Biogenesis Institute de Seattle
Washington, tenemos planes para organizar e impartir próximamente algunos
cursos y un diplomado para formar expertos en nutrición ortomolecular.
Estamos también estudiando la posibilidad de crear la
Federación Internacional de Nutrición Ortomolecular, Asociación Civil (FINO,
A.C.), que complementará próximamente a la actual Asociación Hispano Americana
de Nutrición Alternativa, Ortomolecular y Antienvejecimiento, Asociación Civil
(AHANAOA, A. C.) que se encargará de contribuir a promover y acreditar el
método ortomolecular en todo el mundo.
¿Cree
que la población mundial está cada día más consciente de la necesidad de
prevenir enfermedades, de cuidar su alimentación, de tener una vida más
saludable?
Indudablemente: SI, el implacable avance de la incidencia de
sobrepeso, obesidad y enfermedades de la civilización (enfermedades
crónicodegenerativas) ha colocado al mundo entero al borde de un desastre
seminario y de un precipicio financiero.
En este momento la Asamblea Mundial de la Salud, la
Organización Mundial de la Salud (OMS), la Organización Panamericana de la
Salud (OPS) y los ministerios de salud de todos los países del mundo, se han
dado cuenta, que se debe de cambiar radicalmente el estilo de vida y de
alimentación del ser humano, para poder prevenir y abatir con eficacia la
incidencia de enfermedades modernas, la muerte prematura y los enormes gastos
sanitarios.
“Poderoso señor es don dinero”; y si el padecer y el
sufrimiento humano no ha logrado cambiar la filosofía, los criterios y las
directrices de alimentación y de atención sanitaria, los enormes gastos que
actualmente se utilizan para atender las secuelas de la obesidad, la diabetes,
le enfermedad cardiovascular, el cáncer y otras enfermedades crónicas, sí que
han puesto en estado de alarma a los organismos sanitarios internacionales, a
los gobiernos y a las instituciones sanitarias de los diversos países del
mundo.
Así que
ahora todo el mundo está ya de acuerdo en que lo más importante es la
prevención.
En lo que no hay consenso es en el o los métodos a utilizar.
Hay divergencia en cómo trabajar para prevenir las enfermedades, pero,
indudablemente el paradigma ortomolecular es contemplado actualmente por muchos
como una de las mejores alternativas para trabajar con excelentes resultados en
la prevención.
¿Y
qué opina de los niños y la incidencia preocupante de la obesidad infantil?
La incidencia de obesidad infantil continuará creciendo en
todo el mundo, como ha sucedido principalmente en México y en Estados Unidos,
si no se toman medidas adecuadas y drásticas como suprimir al 100 % los
“alimentos chatarra”, los alimentos refinados y se educa a los padres de
familia y a los hijos para mejorar su estilo de vida y principalmente la
alimentación.
¿Quiénes
son responsables: los papas, la industria, la falta de educación sobre
alimentación y salud, el sedentarismo?
Considero que la mayor responsabilidad recae sobre los
gobiernos, siendo estos los encargados de crear las políticas públicas
necesarias para educar y proteger al consumidor y a todos los sectores
sociales, y las instancias que deben regular la producción de alimentos,
prohibiendo la elaboración “productos comestibles artificiales” que parecen alimentos,
pero que no lo son, pues carecen de calidad nutricional y de las
características básicas que debe tener un alimento natural. Los alimentos
artificiales (alimentos chatarra( contienen una enorme cantidad de energía
concentrada en forma de azucares, harina y grasas refinadas e industrializadas
junto a una muy pobre cantidad de micronutrientes, nutrientes accesorios y
fitoquímicos protectores, y la mayoría contienen además aditivos químicos
sintéticos, sumamente perjudiciales para la salud humana.
¿Actúa
la nutrición ortomolecular a un nivel más estético, es decir, se refleja la
salud interior en el cabello, la piel, las uñas…? ¿Puedo retardar mi envejecimiento
prematuro?
Desde luego que sí. La buena nutrición se nota pues se debe
reflejar en el aspecto físico y estético. Una persona bien nutrida luce bien.
Luce radiante, con una personalidad vigorosa y bella presencia. Una persona mal
nutrida luce desvitalizada, desgajada, con una presencia física, con una pobre
y desagradable personalidad.
La buena y correcta nutrición, o sea una nutrición
ortomolecular es capaz de lentificar el ritmo del envejecimiento, evitando los
signos de envejecimiento prematuro, puede revertir los marcadores biológicos
del envejecimiento, prevenir las enfermedades que se atribuyen al
envejecimiento y evitar una senescencia y una muerte prematura. Puede por lo
tanto incrementar la expectativa de vida saludable, vigorosa y exitosa.
¿Qué
tipo de señales pueden advertirme que debo cambiar mi estilo de vida y hábitos?
¿Por dónde debo empezar a
cuidarme? ¿En
cuánto tiempo puedo empezar a ver resultados y de qué tipo?
Las enfermedades crónicodegenerativas tienen un tiempo de
incubación de entre 20 y 40 años, las alteraciones biológicas y metabólicas
subyacentes y comunes a este tipo de enfermedades producto de la civilización
industrial, son la mayoría de las veces silenciosas. Sin embargo existen
diversas señales de advertencia que nos indican que algo estamos haciendo mal
con nuestro cuerpo y que en definitiva algo debemos cambiar.
Las primeras manifestaciones de la mala nutrición (de una
nutrición errónea) son la disminución de la vitalidad y del gusto por la vida,
la perdida de la alegría, el incremento del diámetro abdominal, de peso, de la
grasa corporal, en especial de la grasa abdominal, y de la grasa intraabdominal
y hepática.
En una siguiente fase hay dislipidemia, irregularidades de
los lípidos en la sangre, de colesterol, lipoproteínas y triglicéridos.
Disglicemia, irregularidades de azúcar en la sangre. Subidas y bajadas bruscas
de glucosa en la sangre que producen bruzo cambios en el estado de ánimo,
cansancio decaimiento y en algunos casos depresión. Progresivamente se
incrementa la producción de insulina, seguida por resistencia a la insulina, luego más producción de
insulina y después más resistencia a la insulina, siendo este último fenómeno
la causa principal de la obesidad.
Por definición toda persona con un IMC (Índice de Masa
Corporal), un perímetro abdominal superior a 80 centímetros en la mujer y 90
centímetros en los hombres, y un porcentaje de grasa corporal superior al 25 %
en la mujer y l 18 % en los hombres, es una persona prediabético, propensa a
enfermedades cardiovasculares y además está en un estado de aceleración de su ritmo de envejecimiento.
Este estado prediabético se puede confirmar midiendo las
concentraciones en la sangre de
glucosa, hemoglobina glicosilada (A1C), péptido C, proteína C reactiva,
colesterol total, lipoproteínas de baja densidad y de muy baja densidad y
triglicéridos. También es muy importante la medición y monitoreo de los signos
vitales, teniendo presente que una presión arterial tanto sistólica como
diastólica ligeramente elevada, es signo de problemas bioquímicos, hormonales y
metabólicos, así como de cambios reológicos y patológicos en la sangre.
Todos los datos anteriores nos pueden indicar el grado de
hiperinsulinemia, resistencia a la insulina, glicocilación ni enzimática de
proteínas y otras anormalidades y alteraciones químicas, enzimáticas y
hormonales.
Después de varios años de disglicemias y dislipidemias,
puede haber un agotamiento de las glándulas adrenales, caracterizada por el
oscurecimiento de ciertas zonas de la piel, y de una dificultad cada vez mayor
para controlar la glucosa en la sangre en rangos aceptables lo que puede
producir bruscos bajones de azúcar, mareos, agotamiento, angustia, depresión,
estado de pánico etcétera.
¿Por
último, por favor cuéntenos cómo fue el II Congreso Internacional de Nutrición
Integrativa, Ortomolecular y Antienvejecimiento realizado el pasado fin de
semana en Chile?
Este
fue el segundo congreso mundial organizado por Nutrigestión (de Santiago de
Chile), Biogenesis Institute of Seattle Washington, para la Asociación Hispano
Americana de Nutriología Alternativa, Ortomolecular y Antienvejecimiento,
Asociación Civil (AHANAOA A. C.).
Fue
una gran reunión internacional de profesionales de la salud de diversos países
de todo el mundo, principalmente de hablar hispana, entre los cuales
participaron México, Argentina, Chile, Ecuador, Colombia, Venezuela, Uruguay,
Paraguay, Peru, Costa Rica, El Salvador, Estados Unidos y otros, con el fin de
compartir conocimientos relativos a la nutrición ortomolecular y la medicina
natural. Se impartieron excelentes e ilustrativas conferencias, con fascinantes
temas, con los que se actualizaron el nivel y grado de conocimientos de los
profesionales de la salud que participaron en el congreso. Se impartieron
previamente dos cursos precongreso, uno de medicina natural y otro de nutrición
ortomolecular.
Todos
los profesores, los conferenciantes y los espectadores, participaron con gran
entusiasmo, respeto y cordialidad y con un mismo acuerdo y consenso, que puede
resumirse, en una idea filosófica capital: para recuperar la salud es necesario
retornar a la naturaleza, volver a trabajar en consenso con la naturaleza,
promover la medicina natural y la nutrición ortomolecular.
Las
conferencias y cursos impartidos durante el congreso bastaron para cautivar y
convencer a los participantes del beneficio, la importancia y el futuro de la
nutrición ortomolecular.
Por
último se celebró un importante acuerdo anunciado al final de nuestro evento:
realizar el próximo congreso dentro de dos años, en la bella ciudad de Arequipa
Perú en el año 2015; por otra parte se informó que los siguientes dos congresos
después del de Arequipa, serán realizados en México (en la ciudad de México) en
el año 2017 y el siguiente en Seattle Washington, Estados Unidos en el año
2019.
Además se anunciaron nuestros planes de
organizar e impartir próximamente un curso para formación de expertos en
nutrición ortomolecular en la Ciudad de México dentro de uno o dos años, así
como un diplomado de nutrición ortomolecular que se impartirá en dos
modalidades, una presencial y la
otra a distancia, avalado por la American University of Holistic Healing, del
estado de New Jersey en Estados Unidos.
Miguel
Leopoldo Alvarado Saldaña
Executive director
Biogenesis Institute LLC
Seattle Washington